¿Qué es la babesiosis?
La babesiosis es una enfermedad muy poco frecuente que ocurre cuando unos parásitos diminutos infectan los glóbulos rojos, generalmente después de haber recibido la picadura de una garrapata infectada.
En Estados Unidos, los casos de babesiosis relacionados con las picaduras de garrapata (también conocidos como fiebre de las aguas rojas o piroplasmosis) son más frecuentes en el Noreste y en la región central norte de los Estados Unidos. No todas las personas infectadas presentan síntomas, pero hay tratamiento para aquellas personas que los presenten.
¿Cuál es la causa de la babesiosis?
La babesiosis está causada por un parásito llamado Babesia microti, tan pequeño que solo se puede ver utilizando un microscopio. Las mismas garrapatas que trasmiten la enfermedad de Lyme (las garrapatas Ixodes, también conocidas como la garrapata del ciervo o de patas negras) pueden contraer este parásito al alimentarse de animales infectados, como los roedores. Y luego, pueden trasmitir los parásitos a los seres humanos a través de sus picaduras. Una persona puede contraer tanto la enfermedad de Lyme como la babesiosis al mismo tiempo.
Raramente, la babesiosis se puede contraer a través de una transfusión de sangre o se la puede trasmitir la madre al feto a través de la placenta.
La babesiosis no se puede contagiar de una persona a otra.
¿Cuáles son los signos y los síntomas de la babesiosis?
Una vez los parásitos entran en el torrente sanguíneo de una persona, se reproducen e infectan sus glóbulos rojos. Esto no siempre causa síntomas, pero a veces puede llevar a:
- presentar síntomas gripales, como fiebre, escalofríos, sudores, dolor de cabeza, dolores corporales, pérdida del apetito, náuseas y cansancio
- en personas con sistemas inmunitarios débiles o afecciones graves, puede causar anemia, bajo recuento de plaquetas, ictericia, disfunción orgánica e, incluso, la muerte
¿Cómo se diagnostica la babesiosis?
Los médicos diagnostican la babesiosis preguntando por los síntomas de la persona y haciendo análisis de sangre para detectar parásitos dentro de los glóbulos rojos. Es posible que también manden otras pruebas para confirmar la infección.
¿Cómo se trata la babesiosis?
La babesiosis suele remitir por sí sola en un plazo de tiempo de una a dos semanas y causa síntomas leves, en caso de que los cause. Para tratar los casos graves, los médicos suelen recetar medicamentos antiparasitarios para aliviar los síntomas y matar a los parásitos. Las personas que reciben este tratamiento se suelen empezar a encontrar mejor al cabo de 48 horas de iniciar la medicación.
¿Se puede prevenir la babesiosis?
No existe ninguna vacuna para prevenir la babesiosis. La mejor forma de prevenir esta enfermedad consiste en prevenir las picaduras de garrapata. Para proteger a su familia al aire libre:
- Caminen por la parte central de sendas y caminos, en vez hacerlo entre la hierba alta y los árboles del bosque.
- Lleven botas o zapatos cerrados, camisa o camiseta de manga larga y pantalones largos. Métanse los extremos de las perneras de los pantalones dentro de las botas o de los calcetines para impedir que las garrapatas les suban por las piernas.
- Utilicen repelente de insectos.
- Consideren la posibilidad de tratar su ropa e indumentaria con permetrina a fin de repeler las garrapatas. Cuando se usa adecuadamente, la permetrina es segura para todas las edades. Pero no la use en prendas de ropa u otros materiales que su hijo podría meterse en la boca, chupar o mordisquear.
- Lleven ropa de color claro para facilitar la detección de las garrapatas.
- Dense duchas o baños, lavándose el cabello, para eliminar las garrapatas después de haber pasado tiempo al aire libre. Revise a los niños y las mascotas para asegurarse de que no llevan adherida ninguna garrapata antes de entrar en casa.
Si les pica una garrapata, el hecho de quitársela de inmediato puede ayudar a impedir que la garrapata les trasmita parásitos o gérmenes.
¿Qué más debería saber?
Los casos de babesiosis están creciendo en Estados Unidos, pero siguen siendo raros, y la mayoría de las personas que desarrollan esta enfermedad no requieren tratamiento.