¿Qué es la escoliosis congénita?
La escoliosis consiste en que los huesos de la columna vertebral (vértebras) no se forman con normalidad antes de nacer. El bebé puede nacer con la columna vertebral más curvada de lo normal o bien desarrollar una columna de estas características más adelante.
De ser necesario, hay tratamientos que pueden ayudar a los niños con escoliosis congénita.
¿Cuáles son los signos y los síntomas de la escoliosis congénita?
Al nacer, un niño con escoliosis congénita puede no presentar ningún síntoma de esta afección. Cuando el niño hace un estirón alrededor de los 2 años de edad o durante la pubertad, puede presentar los siguientes signos:
- columna vertebral más curvada de lo normal
- hombros, caderas o línea de la cintura desnivelados
- cabeza ladeada
En contadas ocasiones, la escoliosis congénita puede causar problemas en la médula espinal o los nervios.
Los niños con escoliosis congénita también pueden tener problemas en la manera en que se les formaron otros órganos (como el corazón, los riñones, el estómago y la vejiga) antes de nacer.