¿Qué es un quiste pilonidal?
Un quiste pilonidal, también conocido como quiste sacro, es un saco lleno de líquido que se forma debajo de la piel en la parte baja de la espalda, cerca del pliegue de las nalgas. Algunos de ellos no se pueden ver, mientras que hay otros que se pueden ver como un pequeño hoyuelo o bultito en la piel.
No suelen causar problemas ni requerir tratamiento a menos que se infecten. Un quiste pilonidal infectado se llama absceso pilonidal.
-
Resumen de 45 segundos: Quiste pilonidal
Aprende lo básico en 45 segundos.
¿Cuáles son los signos y los síntomas de los quistes pilonidales?
Un quiste pilonidal que no está infectado puede no causar ningún síntoma. Una persona con un quiste infectado puede tener:
- dolor, enrojecimiento e hinchazón en la zona donde se encuentra el quiste.
- pus o sangre saliendo por una pequeña abertura (llamada tracto sinusal) en la piel que cubre el quiste o la que está cerca de él.
- fiebre
¿Cuáles son las causas de los quistes pilonidales?
Los médicos creen que los quistes pilonidales se forman cuando pelo y células de piel muerta quedan atrapados bajo la piel. Cuando nos sentamos o nos agachamos, la piel que cubre la rabadilla se estira. Esto puede hacer que se desprendan algunos pelos. Cuando una persona se mueve, pelos rotos y células de piel muerta pueden acabar siendo empujados hasta llegar a estar bajo de la piel. El sistema inmunitario trata el pelo y las células de piel muerta como si fueran sustancias extrañas y forma un quiste alrededor de ellas que se llena de líquido.
Cualquier persona puede desarrollar un quiste pilonidal, aunque este tipo de quistes son más frecuentes en los hombres jóvenes.
Un quiste pilonidal puede ser más probable si alguien:
- nace con un hoyuelo o un bultito en la rabadilla
- pasa mucho tiempo en la postura de sentado
- tiene sobrepeso
- tiene mucho pelo corporal, sobre todo si el recio y áspero
- lleva ropa apretada que le presiona la zona de la rabadilla
- tiene familiares que han tenido quistes pilonidales
¿Cómo se diagnostican los quistes pilonidales?
Por lo general, los médicos pueden diagnosticar un quiste pilonidal basándose en dónde sale, qué aspecto tiene y cómo se nota al tacto.
¿Cómo se tratan los quistes pilonidales?
Un quiste pilonidal que no causa síntomas puede no requerir ningún tipo de tratamiento. El médico puede recomendar eliminar el vello de la zona afectada con láser (depilación láser) u otros métodos.
El tratamiento de un absceso pilondal depende de lo grave que sea la infección. El tratamiento en casa con baños de asiento y compresas tibias permite tratar las infecciones más leves. Si el tratamiento en casa no funciona o si la infección es más grave, los médicos pueden tener que hacer un pequeño corte para drenar el absceso. Y pueden recetar antibióticos si la infección se extiende a la piel que hay alrededor del quiste.
Una vez curada la infección, el médico puede operar para tratar la afección y evitar posibles problemas de cara al futuro. Hay un tipo de cirugía, el procedimiento de Gips, donde el médico utiliza una pequeña herramienta quirúrgica para extraer el tracto sinusal y, a continuación, limpiar el pelo y demás impurezas del interior del quiste.
¿Cómo pueden ayudar los padres?
Para tratar un quiste pilonidal en casa:
- Limpie la zona siguiendo las indicaciones que le haya dado el médico de su hijo.
- Si se lo indicara el médico, elimine con regularidad el pelo que cubra la zona usando un producto que sirva para depilar.
- Recuerde a su hijo que evite estar sentado durante largos períodos de tiempo.
- Sugiérale que duerma de lado o sobre el estómago (boca abajo, en vez de boca arriba), lo que le puede resultar más cómodo.
Si a su hijo le han drenado un quiste pilonidal:
- Dele antibióticos siguiendo las instrucciones de su médico si se los ha recetado.
- Cámbiele o retírele el vendaje siguiendo las recomendaciones del médico.
- Su hijo no se podrá duchar, bañar ni nadar hasta que su médico le diga que puede hacerlo.
¿Qué más debería saber?
Incluso después de extraerlos mediante una operación, a veces, los quistes pilonidales vuelven a aparecer. Mantener el área bien limpia y sin que se cubra de pelo puede ayudar a impedir que se formen nuevos quistes y que se infecten.