¿Qué es la fiebre del dengue?
La fiebre del dengue es una enfermedad infecciosa. Puede causar fiebre alta, dolor de cabeza, erupciones y dolor generalizado por todo el cuerpo. Aunque puede ser muy dolorosa, no suele ser mortal. La mayoría de la gente se empieza a encontrar mejor al cabo de varios días y se recupera por completo en un par de semanas.
La fiebre del dengue es frecuente en los países tropicales y subtropicales. Es un problema importante en algunos países de América Latina y del Sudeste asiático. La fiebre del dengue es muy poco frecuente en EE.UU, y solo se ve en personas que se han infectado en otros países y que luego viajaron o emigraron a EE.UU.
¿Cómo se contrae la fiebre del dengue?
Cuando un mosquito pica a una persona que tiene la fiebre del dengue, queda infectado por el virus que causa esta enfermedad. Y puede propagar el virus al picar a otras personas.
La fiebre del dengue no es contagiosa entre seres humanos, lo que significa que no se puede transmitir directamente de una persona a otra. Puesto que hay varios tipos distintos de virus que pueden causar esta enfermedad, una persona la puede contraer en más de una ocasión.
¿Cuáles son los signos y los síntomas de la fiebre del dengue?
En el pasado, la fiebre del dengue recibía el nombre de "fiebre rompehuesos" o "fiebre quebrantahuesos", lo que se puede deber al síntoma de fuerte dolor reumático (en huesos y músculos) que puede provocar. En realidad, la fiebre no rompe ningún hueso, pero en algunos casos le puede producir esa sensación al paciente.
Los síntomas de la fiebre del dengue suelen aparecer de 4 a 14 días después de recibir la picadura de un mosquito infectado. Algunas personas infectadas por el virus no presentarán ningún síntoma. Pero habrá otras que presentarán síntomas durante 2 a 7 días antes de empezar a mejorar.
Una persona con la fiebre del dengue puede presentar los siguientes síntomas:
- fiebre alta
- dolor detrás de los ojos y en las articulaciones, los músculos y/o los huesos
- fuerte dolor de cabeza
- erupción
- sangrado leve en la nariz o las encías
- fácil formación de moretones
Algunas personas pueden desarrollar una forma grave de esta infección, conocida como fiebre hemorrágica del dengue. Las personas afectadas por una fiebre hemorrágica del dengue presentan los síntomas propios de la fiebre del dengue durante 2 a 7 días. Tras la remisión de la fiebre, pueden experimentar alguno de estos síntomas adicionales:
- náuseas y vómitos
- dolor abdominal
- dificultades para respirar
- hemorragias graves
Si la fiebre hemorrágica del dengue no se trata de forma inmediata, los afectados pueden tener hemorragias importantes y un descenso de la tensión arterial, pudiendo incluso llegar a fallecer. Las personas afectadas por la fiebre hemorrágica del dengue necesitan recibir tratamiento en un centro médico de forma inmediata.
¿Cuándo debería llamar al médico?
Si crees que podrías tener la fiebre del dengue, llama a tu médico de inmediato. También deberías llamarlo de inmediato si presentas cualquiera de los síntomas de la fiebre del dengue después de visitar una región donde abunda esta fiebre.
El médico (o un enfermero) te examinará. Te formulará preguntas sobre cómo te encuentras, tus antecedentes médicos y los viajes que has hecho hace poco. Es posible que te pida un análisis de sangre para saber si padeces esta enfermedad.
Si te han diagnosticado una fiebre del dengue, llama a tu médico o acude a un servicio de urgencias médicas inmediatamente en caso de que te empeoren los síntomas o de que te aparezcan nuevos síntomas, sobre todo al día o a los dos días de que te baja la fiebre.
¿Cómo se trata la fiebre del dengue?
En los casos leves, los médicos suelen recomendar beber mucho líquido para evitar la deshidratación, descansar mucho y tomar paracetamol para aliviar la fiebre y el dolor. Las personas afectadas por esta enfermedad no deben tomar medicamentos que contengan ácido acetilsalicílico (como la aspirina) ni ibuprofeno, ya que ambos favorecen las hemorragias.
La mayoría de los casos de fiebre del dengue remiten en un par de semanas y no provocan complicaciones a largo plazo. Pero la fiebre hemorrágica del dengue requiere tratamiento hospitalario, con administración de líquidos por vía intravenosa (VI) y una atenta supervisión. Por eso es tan importante llamar al médico o ir a un servicio de urgencias hospitalarias si los síntomas son graves o empeoran al cabo de uno o dos días de que la fiebre baja. (Esta es la forma en que la fiebre hemorrágica del dengue se suele desarrollar.)
¿Cómo puedo prevenir la fiebre del dengue?
Puedes contribuir a prevenir el contagio por fiebre del dengue evitado las picaduras de mosquito. Si vives o vas a visitar un área donde abundan los casos de fiebre del dengue, adopta las siguientes precauciones:
- Utiliza mosquiteros en puertas y ventanas. Repara rápidamente los mosquiteros rotos o deteriorados. Mantén bien cerradas las puertas y ventanas que carezcan de mosquiteros.
- Lleva camisa de manga larga, pantalones largos, zapatos y calcetines cuando salgas al aire libre.
- Coloca un mosquitero sobre tu cama por las noches.
- Utiliza un repelente de insectos tal y como indican sus instrucciones de uso. Escoge uno que contenga DEET o aceite de eucalipto limón.
- Limita la cantidad de tiempo que pasas al aire libre durante el día, sobre todo a las horas del amanecer y del atardecer, cuando los mosquitos están más activos.
- No proporciones a los mosquitos lugares donde se puedan reproducir. Los mosquitos ponen los huevos en el agua. Por lo tanto, deshazte del agua estancada en objetos como piscinas inflables o canaletas. Cambia el agua de los bebederos para aves, los cuencos de los perros y los jarrones de flores cada pocos días.
Todavía no se ha desarrollado una vacuna contra la fiebre del dengue. Puesto que esta infección abunda en las zonas tropicales y subtropicales, adopta las precauciones necesarias cuando visites esas regiones.