¿Qué es la diarrea?
La diarrea consiste en evacuar heces blandas o sueltas con frecuencia. La mayoría de la gente tiene diarrea de vez en cuando. No suele durar mucho y generalmente mejora por si sola.
Causas de la diarrea
La diarrea suele estar causada por una infección intestinal. Los gérmenes que causan estas infecciones son:
- los virus (los más frecuentes)
- las bacterias
- los parásitos
Los virus
La gastroenteritis viral (a menudo llamada "gripe intestinal" o "gripe estomacal") es una enfermedad frecuente. Causa diarrea y, a menudo, náuseas y vómitos. Sus síntomas suelen durar unos pocos días. Los virus que causan la gastroenteritis viral se pueden contagiar rápidamente en los domicilios (o en residencias estudiantiles para universitarios u otros lugares donde vive mucha gente) porque se trata de unas infecciones muy contagiosas.
Afortunadamente, la diarrea suele desaparecer por sí sola al cabo de pocos días. En los adolescentes y los adultos sanos, la gastroenteritis viral es una molestia frecuente pero que carece de importancia. Pero en los bebés, los niños pequeños y las personas con enfermedades crónicas, la diarrea puede llevar a una deshidratación que requiere atención médica.
Las bacterias
En los países desarrollados, como EE.UU., los brotes de diarrea se suelen deber a lo que se conoce como intoxicaciones alimentarias. Las intoxicaciones alimentarias ocurren cuando las bacterias fabrican toxinas en aquellos alimentos que no se manipulan, no se conservan o no se cocinan con seguridad.
Otra infecciones bacterianas que pueden causar diarrea son las infecciones por E. coli, la salmonelosis, y la shigelosis
Los parásitos
El parásito Giardia se propaga fácilmente a través del agua contaminada y del contacto entre seres humanos. Este parásito se puede propagar en el agua de parques y piscinas porque es resistente a los tratamientos con cloro. Bañarse en agua infectada y beber agua procedente de riachuelos o lagos infectados puede conducir a contraer está infección y a la diarrea crónica. Los bebés que van a guarderías o jardines de infancia pueden contraer infecciones por Giardia y contagiar este parásito a sus familiares, provocándoles diarreas.
Hay otro parásito, el Cryptosporidium, que es el responsable de muchas de las epidemias de diarrea que se declaran en los jardines de infancia y en otros lugares de uso público. El Cryptosporidium suele causar diarreas acuosas que pueden durar dos semanas o más.
¿Qué más puede causar una diarrea?
La gente también puede tener diarrea debido a:
- una dieta alta en azúcares
- las alergias alimentarias
- la intolerancia a la lactosa
- problemas intestinales, como la enfermedad celíaca y las enfermedades inflamatorias intestinales (la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa).
¿Cuáles son los signos y los síntomas de la diarrea?
La gente suele empezar teniendo dolores de estómago o retortijones, que van seguidos de una diarrea que puede durar de 3 a 5 días. Entre otros síntomas, se incluyen los siguientes:
- fiebre
- pérdida del apetito
- náuseas (una sensación desagradable antes de vomitar)
- vómitos
- pérdida de peso
- deshidratación
¿Cómo se trata la diarrea?
La mayoría de las infecciones que causan diarrea, sobre todo las de origen viral, remiten por sí solas sin tratamiento. Quedarse en casa, tomarse las cosas con calma y beber abundante cantidad de líquidos para evitar la deshidratación son las mejores formas de superar esta enfermedad. Si te acabas quedando deshidratado, es posible que necesites ir al hospital para que te administren líquidos por vía intravenosa (VI) para reemplazar los que habrás perdido a través de la diarrea, los vómitos y la fiebre.
Si vas al médico, es posible que te pida que recojas una muestra de heces para averiguar qué tipo de infección has contraído. Que necesites o no medicarte es algo que dependerá de cuál sea el germen que te está provocando la diarrea. Una enfermedad parasitaria se deberá tratar con medicamentos antiparasitarios. A veces, las diarreas de origen bacteriano se tratan con antibióticos para que la infección no se extienda por todo el cuerpo.
¿Cómo se pueden prevenir las diarreas?
Es casi imposible prevenir todos los casos de diarrea. Pero hay algunas formas de reducir la probabilidad de que ocurra:
- Lávate las manos bien y con frecuencia, sobre todo después de ir al baño y antes de comer. Lavarse las manos es la forma más eficaz de prevenir el contagio entre personas de las infecciones que cursan con diarrea.
- Mantén las superficies del baño, como las del lavabo y las del váter, bien limpias.
- Lava bien las frutas, verduras y hortalizas antes de comerlas y de cocinarlas.
- Lava las encimeras de la cocina y los útiles de cocina cuidadosamente después de que hayan entrado en contacto con carne cruda, sobre todo, si procede de aves de corral.
- Refrigera la carne lo antes posible cuando vuelvas del supermercado. Cocínala hasta que deje de estar rosada. Después de comer, refrigera las sobras lo antes posible.
- No bebas nunca agua de riachuelos, manantiales o lagos, a menos que las autoridades locales hayan certificado que el agua es potable y segura.
- Evita lavar las jaulas y los comederos de las mascotas en el fregadero que usas para preparar la comida. Y trata de mantener la parte de la casa donde se alimentan las mascotas separada del lugar donde come tu familia.
¿Cuándo debería llamar al médico?
Explícaselo a un adulto cuando tengas diarrea, fiebre, vómitos o un fuerte dolor de barriga. Ese adulto te puede ayudar a decidir si conviene que te vea un médico.
Si estás apático y tienes la piel y la boca secas, o si tus heces contienen sangre o mucosidades, deberías ir al médico de inmediato. Ve también al médico si estás vomitando tanto que no puedes retener los líquidos o si los síntomas te duran más de 3 días.
¿Qué puedo hacer para encontrarme mejor?
Te encontrarás mejor si estás bien hidratado; por lo tanto, hidrátate bebiendo abundante cantidad de agua. En la diarrea también se pierden electrolitos (sodio y potasio), de modo que los debes ingerir porque tu cuerpo no puede funcionar adecuadamente sin ellos. Trata de dar sorbitos a sopas o caldos, que contienen sodio, y a jugos de frutas diluidos (y sin azúcar añadido), que contienen potasio.
Cuando te sientas preparado para comer algo más sustancioso, prueba con frutas o verduras, que también contienen potasio. Evita los productos lácteos y grasos, los de alto contenido en fibra y los alimentos que sean muy dulces hasta que te dejes de tener diarrea. Y no se te ocurra tomar bebidas deportivas o refrescos; es cierto que contienen electrolitos, pero su elevado contenido en azúcares te podría empeorar la diarrea.
Por molestas que puedan ser las diarreas, suelen ser de corta duración. Bebe suficiente cantidad de líquidos y sigue las instrucciones de tu médico, y te encontrarás mejor en menos que canta un gallo.