¿Qué es un espirómetro incentivador?
Un espirómetro incentivador es un dispositivo de mano que ayuda a las personas a inhalar lenta y profundamente. Viene a ser un equipo para ejercitar los pulmones a fin de mantenerlos fuertes y funcionando bien.
¿Por qué la gente necesita usar espirómetros incentivadores?
Respirar hondo o con profundidad ayuda a que llegue una cantidad suficiente de aire a los pulmones para que se inflen lo máximo posible. Respirar despacio o con lentitud ayuda a llenar todas las áreas de los pulmones, en lugar de solo una parte de ellas.
Cuando una persona no respira lo bastante hondo, se le pueden acumular líquidos y gérmenes en los pulmones. Esto puede causar infecciones, como la neumonía. El uso de un espirómetro incentivador puede ayudar a impedir que esto ocurra.
Usar un espirómetro incentivador no solo ayuda a las personas que se están recuperando de una operación. También ayuda a las personas con enfermedades, como la fibrosis quística, que afectan a los pulmones.
¿Cómo funcionan los espirómetros incentivadores?
Los espirómetros incentivadores están fabricados con plástico hueco y transparente. Tienen un tubo con una boquilla.
La parte principal del espirómetro te muestra cuán profundamente inspiras. Los espirómetros tienen una tabla de medición grande, con líneas y cifras. Cuando inspiras, un émbolo se desplaza hacia arriba sobre las líneas. El émbolo es el disco grande de color azul en la parte principal del espirómetro (como se ve en la imagen anterior). Cuanta mayor cantidad de aire te llegue a los pulmones, más alto subirá el émbolo. Tu equipo médico desplazará el marcador sobre la tabla de medición principal para fijar una meta de lo profundamente que deberías respirar.
En la parte lateral del espirómetro, hay un indicador de amplitud que muestra lo despacio que inspiras. Junto a la parte principal del espirómetro, hay un área con flechas o líneas que muestran una amplitud. Cuando inspires, una pelota (u otro indicador) subirá y bajará. Si respiras demasiado deprisa, se disparará hasta llegar al tope. Necesitas respirar despacio, pero no demasiado despacio, para mantener el indicador dentro de los márgenes deseables.