Elegir e instruir a una persona para que cuide de su hijo
Encontrar a un cuidador cualificado requiere tiempo y esfuerzo. Pero la recompensa es saber que su hijo está en las mejores manos. Le interesa encontrar a una persona que sea madura y amable, que tenga sentido común, le gusten los niños y los sepa llevar.
Las recomendaciones de personas que conoce y en quienes confía son la mejor apuesta para encontrar a alguien capaz y fiable. Si se ha mudado hace poco y no sabe cómo encontrar a un buen cuidador:
- Sus vecinos o sus compañeros de trabajo lo pueden dar recomendaciones.
- Si es creyente, también puede preguntar en su lugar de culto religioso.
- También puede pedir recomendaciones en el consultorio del pediatra de su hijo.
- Consulte el listado de cuidadores de niños de la sede local de la Asociación de Jóvenes Cristianos (YMCA, por sus siglas en inglés), su hospital local, o la sede local de la Cruz Roja Americana. Muchas de las personas que aparezcan en esos listados habrán completado cursos sobre cuidado infantil, seguridad infantil y reanimación cardiopulmonar (RCP) en bebés y niños.
- Si su hijo va a una guardería o jardín de infancia o si asiste a actividades extraescolares, pregunte a miembros de su personal si trabajan cuidando a niños o si le pueden recomendar a alguien de confianza que desempeñe esa labor.
Entrevistar a posibles cuidadores y comprobar sus referencias lo ayudará a reducir la opciones entre las que escoger. Prepare con tiempo de antelación un listado de preguntas a formular.
Pregunte:
- sobre su experiencia previa cuidando niños
- si disponen de un certificado de reanimación cardiopulmonar RCP en bebés y niños
- si han hecho un curso para cuidar niños
- cómo se sienten con respecto a las mascotas, en el caso de que disponga de una
Es una buena idea que invite a los posibles cuidadores de su hijo a pasar una prueba mientras usted está en casa. Así, se podrán familiarizar con el entorno doméstico y usted verá cómo se relacionan con su hijo.
Instrucciones para el cuidador
Antes de salir de casa, prepare al cuidador. Asegúrese de:
- Revisar con él las rutinas habituales de su hijo (deberes, hora de acostarse, horas de las comidas). Hablar con él sobre las normas generales de la casa, incluyendo los límites relacionados con la televisión, el uso de la computadora, los videojuegos, jugar fuera de casa, etc.
- Indique al cuidador dónde estará y cómo puede contactar con usted en todo momento, así como en qué circunstancias debe llamar al teléfono de emergencias (el 911) antes de ponerse en contacto con usted.
- Enséñele dónde tiene colgado el teléfono del centro de control toxicológico (1-800-222-1222). Debe estar en un lugar fácil de ver y de encontrar.
- Asegúrese de que el cuidador sepa con quién debe ponerse en contacto en caso de emergencia. Dele una lista de teléfonos a contactar en caso de emergencia, que incluya los siguientes teléfonos:
- vecinos
- amigos
- parientes
- el médico de su hijo
- Escríbale el número de teléfono y la dirección de su casa. Así, en caso de emergencia, el cuidador podrá facilitar esa información cuando se la pida el operador del 911.
- Enseñe al cuidador dónde están las salidas de emergencia, los detectores de humo y los extintores.
- Muéstrele como conectar y cómo desconectar los sistemas de seguridad y las alarmas, si dispone de ellos.
- Enséñele dónde guarda las copias de las llaves, por si su hijo se quedara encerrado dentro de una habitación.
- Informe al cuidador de cualquier problema especial que tenga su hijo, como:
- una alergia (a las picaduras de abeja, a algún alimento etc.)
- la necesidad de usar algún medicamento en momentos específicos (explíquele y anote las instrucciones)
- Revise con el cuidador el botiquín de primeros auxilios.
Enseñe a su hijo a usar el teléfono de emergencias (911) para pedir ayuda, por si le pasara algo al cuidador.
Deje bien claro cuáles son sus expectativas antes de salir de casa. Si prefiere que el cuidador no salga de casa con su hijo, déjeselo claro. Si el cuidador conduce, pregúntele por su experiencia como conductor y dígale cuáles son las normas a seguir sobre llevar en coche a su hijo. Si no quiere que el cuidador reciba visitas, déjeselo claro.
Cuestiones de seguridad
Asegúrese de que el cuidador conoce las siguientes normas de seguridad:
- No dar a su hijo ningún medicamento sin contar con instrucciones suyas específicas.
- No dejar a su hijo solo en casa ni en el patio o jardín, ni tan solo un minuto.
- No dejar nunca a su hijo en o cerca del agua sin supervisión. Los bebés y los niños pequeños se pueden ahogar en solo unos pocos centímetros de agua, incluso en un cubo o en un inodoro.
Si su hijo es menor de 4 años, su cuidador debería conocer estas normas:
- No darle nunca palomitas de maíz, frutos secos, caramelos duros, zanahorias crudas o ningún otro tipo de alimento duro y/o liso que le podría obstruir la tráquea y causarle atragantamientos y asfixias por aspiración.
- No servirle alimentos como los perritos calientes o las uvas enteras. Estos alimentos se deben partir en trozos pequeños, y a las salchichas se les debe quitar la piel.
- No permitir que juegue con bolsas de plástico, globos de látex, monedas u otros objetos pequeños con los que se podría atragantar y asfixiar.
- No dejarle jugar cerca de las escaleras, las ventanas, la cocina o los enchufes.
Cuando vuelva a casa, pregúntele a su hijo si ha disfrutado de la visita del cuidador. Cuando encuentre a un cuidador de confianza y que le guste a su hijo, seguro que usted estará más relajado y disfrutará más cuando salga de casa.