La actividad física y su hijo de 2 a 3 años de edad
Los niños de esta edad andan y corren, chutan pelotas y lanzan cosas. Son activos por naturaleza, de modo que ofrezca a su hijo muchas oportunidades para practicar estas habilidades.
¿Cuánto es suficiente? Las recomendaciones relacionadas con la actividad física de los niños de entre 2 y 3 años de edad indican que cada día:
- hagan un mínimo de 30 minutos de actividad física estructurada (guiada por un adulto)
- hagan un mínimo de 60 minutos de actividad física no estructurada (juego libre activo)
- no estén inactivos durante más de 1 hora seguida, salvo cuando duerman
Qué pueden hacer los niños
Es importante entender qué son capaces de hacer los niños y qué habilidades son las apropiadas para esta edad. Alrededor de los 2 años de edad, los niños deben ser capaces de andar y correr bien. Pueden ser capaces de patear una pelota y de saltar en el mismo lugar con ambos pies. Alrededor de los 3 años de edad, los niños suelen ser capaces se sostenerse brevemente sobre un solo pie, chutar una pelota hacia delante, lanzar una pelota por encima de la cabeza, atajar una pelota al vuelo y pedalear en triciclo.
Tenga en mente estas habilidades mientras anima a su hijo a mantenerse activo. Jueguen los dos juntos y ofrézcale juegos apropiados para su edad, como pelotas, juguetes que se empujan y que se arrastran y vehículos para montar. A través de la práctica, los niños seguirán mejorando y refinando sus habilidades motoras.
Los programas "Mommy-and-me" (Mama y yo) pueden introducir a los niños de esta edad en distintos tipos de actividades físicas, como las volteretas, el baile y el movimiento en general. Pero no es necesario que inscriba a su hijo en un programa formal para favorecer estas habilidades. Lo más importante de todo es ofrecer a su hijo muchas oportunidades para estar activo en ambientes seguros.
Consejos para mantenerse en forma como familia
Andar, jugar, explorar el patio o jardín trasero o usar las instalaciones recreativas de un parque puede ser divertido para toda la familia.
Asimismo, los siguientes juegos ofrecen diversión y actividad a padres y a niños:
- Andar como un pingüino, saltar como una rana o imitar los movimientos de otros animales.
- Sentarse cara a cara y darse las manos. Mecer a su hijo en un columpio infantil mientras le canta.
- Doblar la cintura y tocar o tratar de tocar el suelo. Caminar arrastrándose con las manos hacia delante como una oruga.
- Sentarse en el suelo con su hijo y dejarlo saltar sobre sus piernas abiertas, o hacer un puente con su cuerpo y dejar que su hijo gatee por debajo.
- Jugar a imitar gestos y movimientos con un líder que dirija o participar en juegos similares.
- Escuchar música y bailar juntos.
Las posibilidades son infinitas, proponga sus ideas o bien siga las propuestas de su hijo. Asimismo, limite la cantidad de tiempo que su hijo se pasa delante del televisor o de otras pantallas (como los vídeos), jugando con una computadora, una tableta o un teléfono inteligente.
¿Cuándo llamar al médico?
Si su hijo no quiere jugar o unirse a otros niños en deportes o se queja de dolor durante o después de jugar o de estar activo, hable con su médico.
Los niños que son activos de pequeños se mantienen activos durante el resto de su vida. Y mantenerse en forma puede mejorar la autoestima, prevenir la obesidad y reducir el riesgo de desarrollar enfermedades graves como la hipertensión (tensión arterial alta), la diabetes y las enfermedades cardíacas más adelante.