Operación de reducción de mama
¿Qué es la operación de reducción de mama?
La operación de reducción de mama (o de pecho) es un procedimiento que reduce el tamaño de unas mamas grandes. Mantiene la forma natural del pecho y de la areola mamaria (la pequeña área que hay alrededor del pezón) y el pezón. Durante la operación, el cirujano extrae el tejido mamario sobrante siguiendo un patrón específico. Este patrón conserva la areola mamaria y el pezón y coloca el tejido mamario en una posición más apropiada sobre la pared del pecho, al tiempo que reduce el tamaño de la mama.
¿Quién puede necesitar esta operación?
La operación de reducción de mama ayuda cuando unas mamas muy voluminosas causan problemas como:
- dolor persistente en la espalda suprior y media
- marcas molestas en los hombros provocadas por la presión de las tiras de los sujetadores o sostenes
- erupciones debajo de las mamas o entre ambas mamas provocadas por la acumulación de la humedad
- postura encorvada
- dolor de mamas durante la actividad física
La mayoría de las mujeres que se someten a una operación de reducción de mama lo hacen porque les duele la espalda.
¿Es esta operación adecuada para mí?
Los médicos suelen proponer una operación de reducción de mama a aquellas mujeres que tienen problemas por el tamaño excesivo de sus mamas durante más de un año. En las adolescentes, también es importante que el tamaño de las mamas se mantenga estable durante un mínimo de un año.
La mayoría de los seguros de salud exigen que se hayan probado antes los demás tipos de tratamientos antes de aprobar esta operación. Entre ellos, se incluyen los siguientes:
- uso del tipo adecuado de sujetador para pechos grandes
- fisioterapia para ayudar a reducir el dolor de espalda
- tratar cualquier erupción con cremas o polvos
¿Cuáles son los riegos de una operación de reducción de mama?
Cualquier operación supone riesgos, como hemorragias, infecciones y problemas con la anestesia.
Entre los riesgos específicos de la operación de reducción de mama, se incluyen los siguientes:
- asimetría (tamaños desiguales) entre ambas mamas o ambos pezones
- insensibilidad en uno o ambos pezones
- no poder amamantar a un bebé después de someterse a esta operación
- cicatrices perceptibles
- cambio en la forma del pezón
- aberturas en las líneas de las incisiones
- que los puntos de sutura se salgan de las incisiones en vez de disolverse
- “bultos y nódulos" en el tejido mamario provocados por cicatrices internas
¿Qué debo esperar después de someterme a esta operación?
Recuperarse de una operación de reducción de mama lleva un tiempo. Muchas pacientes toman medicamentos para el dolor (llamados analgésicos) de venta con receta médica durante unos pocos días y luego analgésicos de venta libre durante un par de semanas. Las actividades ligeras, como caminar, se pueden iniciar después de la operación. El cirujano te indicará cuáles son las actividades que debes evitar. La mayoría de las pacientes pueden retomar sus actividades regulares un mes después de someterse a esta operación.
Poco después de la operación de reducción de mama, el área del pecho se nota más ligera y muchas chicas notan que la ropa les sienta mejor. Al principio, sus mamas estarán hinchadas y firmes, y más altas en el pecho. Durante los siguientes meses, las mamás se ablandarán y se relajarán, pasando a ocupar su posición natural. Las mamas tardarán hasta un año en ablandarse por completo.
¿Qué más debería saber?
Las mujeres con pechos muy voluminosos se pueden sentir acomplejadas, tener problemas para vestirse y para que la ropa les siente bien y pueden no encontrar sujetadores adecuados para sostener sus mamas.
La operación de reducción de mama suele ser un cambio en la vida de toda mujer joven. El tiempo de recuperación puede ser un desafío, pero la mayoría de ellas se acaban sintiendo satisfechas con la decisión de haberse operado.