El duelo es la tristeza profunda que sentimos cuando se muere un ser querido.
La muerte de un ser querido puede ser un gran cambio en tu vida. Lleva un tiempo afrontar esa pérdida y encontrar maneras de adaptarse a esa ausencia. El apoyo y el consuelo procedente de otras personas te pueden ayudar a atravesar y a sobrellevar el duelo.
¿Cómo te afecta el duelo?
La medida en que te afecte el duelo por la muerte de un ser querido depende de lo cerca que te sentías de la persona que acaba de fallecer. También depende del papel que desempeñaba esa persona en tu vida. Por ejemplo, que se te muera un padre, un hijo, un hermano, un abuelo o un amigo íntimo puede ser mucho más duro que la muerte de alguien a quien no conocías tan bien.
Cómo te afecte una pérdida también puede depender de cómo haya muerto esa persona. El duelo puede ser más intenso si la muerte fue repentina, si la persona murió de manera violenta o si se suicidó. Cuando una persona pierde a un ser querido de esta manera, puede necesitar un apoyo adicional para recuperarse.
A menudo, el duelo es más intenso cuando hace poco que ha muerto la persona. Pero hay gente que no siente la pérdida de inmediato. Puede sentirse como insensible, en estado de shock o no acabárselo de creer. Eso también está bien. Puede llevar un tiempo hacerse a la idea de que la persona se ha ido.
Si estás atravesando un proceso de duelo, te puedes percatar de que:
El duelo afecta a tus sentimientos.
Es probable que tengas muchos sentimientos diferentes. Y la manera en que te sientas puede cambiar de un día a otro. A veces sentirás tristeza, enojo, ansiedad, culpa o desesperación. En otros momentos sentirás alivio, amor, gratitud, ternura o esperanza.
- Trata de tomar conciencia de tus sentimientos y de cómo van cambiando. Trata de aceptar cómo te sientes, en vez de pensar que te deberías sentir de otra manera. Te puede ayudar el hecho de compartir lo que sientes con alguien de confianza. También te puede ayudar el percibir cualquier cosa buena que ocurra durante este período de pérdida y tristeza, por pequeña que sea.
El duelo afecta a tus pensamientos.
Tal vez reflexiones sobre los momentos que compartiste con tu ser querido. Quizás haya cosas que te preocupen o de las que te arrepientas, o pienses en cosas que te gustaría haberle dicho o haber hecho con esa persona. Es posible que pienses en cómo será la vida sin esa persona. O que pienses en lo que esa persona significa para ti.
- Presta atención a las ideas que te vayan pasando por la mente. Tal vez te ayude compartir lo que piensas con otras personas a quienes les importas. Puedes expresar tus ideas y sentimientos sobre papel, ya sea en un diario personal o escribiéndole una carta a tu ser querido. Puede ser una manera de decirle lo que significa para ti, cosas que te gustaría haberle dicho o de agradecerle el hecho de haber estado en tu vida. Date a ti mismo tiempo para pensar y reflexionar, pero permítete hacer pausas y tomarte un respiro cuando lo necesites.
El duelo afecta a tu cuerpo.
El duelo puede afectar al apetito y/o al sueño. Tal vez estés muy cansado y tengas menos energía que de costumbre. O te puedes sentir inquieto. Quizás te cueste relajarte o concentrarte. Puedes notar un peso en el pecho o en la boca del estómago u opresión en la garganta. Perder a un ser querido puede ser muy estresante. Y el estrés puede tener algunos de estos efectos, aunque solo sea de manera temporal, en tu cuerpo.
- Observa cómo el duelo afecta a tu cuerpo. Trata de descansar, comer bien y hacer el ejercicio físico que necesitas. Te puede ayudar practicar técnicas como la respiración consciente.
El duelo te puede llevar a hacerte preguntas importantes.
Mucha gente se pregunta: "¿Por qué ha ocurrido esto?", "¿Qué le pasa a la gente cuando muere?" y "¿Cómo lo puedo afrontar?". Algunas personas se cuestionan sus creencias religiosas. Otras encuentran la fuerza en su fe. Otras descubren conexiones espirituales. Algunas se acercan más a otras personas que son importantes en sus vidas.
- Hacerse preguntas importantes es una oportunidad para tener revelaciones o ideas nuevas. El duelo te puede guiar a encontrar nuevos significados y propósitos en tu vida. Te puede llevar a pensar en cómo sacar el máximo partido de tu vida y qué es lo que más te importa. A algunas personas les sirve reflexionar o escribir sobre estas cosas en su diario personal.
¿Cuánto dura el duelo?
No hay ninguna duración fija para los duelos. Está bien que duren semanas, meses o mucho más.
A menudo, en los primeros días o semanas que siguen a la muerte de un ser querido, la gente cercana se reúne para apoyarse y consolarse mutuamente. Hacen funerales o servicios conmemorativos de despedida. Pasan tiempo juntos hablando sobre el ser querido y compartiendo recuerdos sobre él. Se puede servir comida, repartir tarjetas o recibir visitas de amigos y familiares.
Cuando la gente retoma sus actividades cotidianas, es posible que piense que debería haber superado el duelo. Pero, durante un tiempo, les puede costar meterse plenamente en las obligaciones de cada día. Aunque quizás no hablen sobre su pérdida tanto como antes, seguirán sintiendo el vacío y la tristeza.
El duelo cambia y se siente con menos intensidad conforme va pasando el tiempo. Muchas personas afirman que sienten el duelo en una especie de "oleadas" que vienen y van. En algunos momentos, los recuerdos del ser querido pueden causar una sensación de vacío muy intensa. En otros momentos, el duelo pasa a un segundo plano mientras las personas se concentran en sus actividades cotidianas, de modo que deja de estar en sus mentes durante todo el tiempo.
¿Cuándo empezaré a encontrarme mejor?
Si se ha muerto un ser querido, es normal y natural que sigas triste, con las emociones a flor de piel y haciéndote preguntas durante un tiempo. También es natural empezarse a encontrar un poco mejor cuando vaya pasando el tiempo. Sentirse mejor es algo que suele ocurrir de forma gradual.
La intensidad del duelo, o su duración, no es una medida de cuánto querías a la persona que ha muerto. Sentirse mejor no significa haberse olvidado del ser querido.
Mientras se vaya suavizando tu duelo, es posible que te vayas dando cuenta de que la persona que tanto quieres sigue en ti, en tu corazón, en tus pensamientos y en tus recuerdos, igual que el efecto positivo que ha tenido en tu vida.