¿Es normal pensar mucho en el sexo?
Es normal pensar en el sexo a menudo, hacerlo solo de vez en cuando o no pensar en absoluto sobre el sexo. Durante la pubertad, unas sustancias químicas llamadas hormonas afectan a tu cuerpo y a tus emociones de una manera completamente nueva. Esto puede hacer que sientas curiosidad por el sexo y también que sea más probable que tengas pensamientos y sensaciones de tipo sexual. A medida que vayas experimentando estos cambios, es posible que empieces a encontrar atractivas a algunas personas.
¿Qué es la atracción sexual?
La atracción sexual o el deseo sexual incluye pensamientos, sensaciones corporales y sentimientos hacia otras personas. Es posible que pienses o quieras estar cerca de alguien, o incluso que te sientas raro o incómodo cuando te encuentres cerca de esa persona. Es posible que su proximidad te ponga contento o nervioso. Es posible que te sientas excitado, o que notes calor u hormigueo en el cuerpo. Es frecuente sentirse atraído sexualmente por personas conocidas y también por desconocidas.
Hay personas que no se sienten atraídas sexualmente por nadie ni les gusta nadie. Eso también es normal.
¿Qué pasa si estoy pensando en el sexo?
La mayoría de la gente piensa en el sexo mucho antes de estar preparada para mantener relaciones sexuales. Elegir cuándo empezar a mantener relaciones sexuales es una decisión importante. Es importante estar preparado emocionalmente y saber cómo proteger tu salud y la de tu pareja. Tómate el tiempo que necesites.
Antes de poner en práctica tus pensamientos sobre el sexo, habla con tu pareja. También es aconsejable que hables con uno de tus padres o con otro adulto de confianza. Y es una buena idea consultar a tu médico o a alguien de una clínica como Planned Parenthood (Planificación Familiar). Pueden ayudarte a aprender cómo protegerte de las enfermedades de transmisión sexual (ETS) y del embarazo, y hablarte sobre los condones y otros métodos anticonceptivos.
Lo que se piensa y se siente se sobre el sexo puede ser diferente para cada persona. Esta es una de las partes de convertirse en adulto.