Los divorcios ocurren cuando dos personas están casadas y ya no quieren seguir casadas entre sí o no quieren vivir más juntas. Entonces, se ponen de acuerdo para firmar documentos legales que los convierten otra vez en solteros.
A veces, ambos padres quieren divorciarse, pero en otros casos, solo uno de ellos quiere hacerlo. No es fácil para dos personas decidir terminar con un matrimonio. Con frecuencia pasan mucho tiempo intentando resolver sus problemas antes de divorciarse. Pero, en algunos casos, no lo logran y la mejor opción es la separación.
Cuando ocurren cambios en la familia, pueden aparecer muchas emociones, pero conseguir más información sobre los divorcios puede hacer que te resulte más sencillo afrontarlo.
¿Por qué se divorcian los padres?
Los padres se divorcian por distintos motivos, como los siguientes:
- no dejan de pelear y sienten que ya no pueden vivir más juntos
- el amor que sentían cuando se casaron cambió
- uno de los padres se enamora de otra persona
- uno de los padres tiene un problema grave, como la bebida o abuso y maltrato
- deciden separarse aun cuando no haya ocurrido nada malo
¿Yo causé el divorcio de mis padres?
Sin importar cuales sean las razones de un divorcio, una cosa es segura: los niños no causan un divorcio. La decisión de tus padres de separarse se debe a problemas entre ellos, no a algo que tú hayas hecho o dejado de hacer. Algunos niños creen que si se hubiesen portado mejor, hubiesen obtenido mejores calificaciones o ayudado más en casa, el divorcio no habría ocurrido. Es normal sentirse así y preocuparse por lo que pasó, pero no es tu culpa.
¿Cómo me podría sentir si mis padres se divorcian?
Es probable que si tus padres se están divorciando, sientas muchas emociones fuertes. Muchos niños no quieren que sus padres se separen. Algunos niños tienen sentimientos encontrados si saben que sus padres ya no son felices estando juntos.
Quizás te sientas estresado, enojado, frustrado o triste. Es posible que desees proteger a uno de tus padres o culpar al otro. Tal vez te sientas solo, asustado, preocupado o culpable.
También es normal sentirse aliviado, especialmente si había mucha tensión o peleas en el hogar.
¿Cómo podría un divorcio cambiar las cosas?
Dependiendo de lo que ocurra en tu familia, algunas cosas podrían ser diferentes con un divorcio. Algunos niños deben ir a otra escuela, mudarse o estar con uno de los padres cada vez. Quizás también tengas que hacer frente al maltrato entre tus padres si están enojados por cosas que ocurrieron antes del divorcio o durante el divorcio.
También puede haber cambios positivos. Muchos niños descubren que sus padres están más contentos después del divorcio y se llevan mejor entre ellos.
¿Qué más debería saber sobre los divorcios?
Hazles saber a tus padres cómo te sientes por su divorcio y sé honesto. También te puede ayudar hablar con un adulto en quien confíes. Puedes recurrir a un maestro, un consejero escolar o un líder religioso (como un ministro o un rabino).
Los divorcios pueden ser un gran cambio para toda la familia, pero muchos niños lo han superado. Tú también lo harás.