¡Odio las astillas! Estás caminando feliz por la pasarela de madera y en un segundo: ¡Ay! Y al mirar la planta del pie blanda y rosada te encuentras con un pequeñísimo trozo de madera clavado. Es posible que incluso sientas un pequeño pinchazo a cada paso. ¿Qué deberías hacer?
Aquí encontrarás tres consejos para deshacerte de esa astilla y poder volver a divertirte:
- Díselo a un adulto de inmediato. Si la astilla es muy pequeñita, está cerca de la superficie de la piel y no causa dolor es probable que se salga sola en unos pocos días. Pero, en general, es necesario quitar las astillas No suelen causar problemas graves, pero cuanto antes le digas a alguien, antes podrán quitarla.
Trata de no tocar la astilla porque podrías romper una parte y hacer que sea más difícil quitarla. Si dejas que pase mucho tiempo, la piel puede crecer sobre la astilla y esto también hará que sea más difícil quitarla. Las astillas que quedan debajo de la piel pueden comenzar a causar más dolor e infectarse. - De ser posible, identifica el tipo de astilla. Algunas astillas son pequeños trozos de madera. Otras son de metal o vidrio. También puedes clavarte pinchos o espinas pequeñas, como las de los cactus. Si tienes una astilla, fíjate de dónde viene o dónde ocurrió. Saber de qué tipo de astilla se trata puede ayudar a la persona que está intentando quitarla.
- Conserva la calma mientras un adulto te quita la astilla. A veces, que te quiten una astilla puede darte un poco de miedo porque quizás el adulto deba usar una aguja limpia para hacerlo. ¿Una aguja? ¡Auch! Pero no te preocupes, la aguja limpia se usa solo para raspar un poco la piel y hacer que sea más fácil sujetar la astilla con una pinza. Cuando te hayan quitado la astilla te sentirás mucho mejor.
Por lo general, las astillas se pueden extraer en casa. Pero en algunos casos, tal vez debas ver al médico. Ve al médico si tu astilla parece estar muy profunda, sangra mucho, no sale o parece estar infectada (está roja, inflamada, caliente al tacto o con pus). Si la astilla se clavó debajo de una uña, es posible que resulte difícil quitarla en casa.
¿Cómo puedo evitar las astillas?
¿Qué es mejor que quitarte una astilla del pie? ¡No clavártela nunca! No todas las astillas se pueden prevenir, pero puedes evitar muchas si haces lo siguiente:
- ¡Lleva zapatos! El calzado en los pies protege tus delicados pies de las lastimaduras. Lleva zapatos o sandalias cuando estés al aire libre, especialmente en plataformas, tarimas o pasarelas de madera. Además, lleva calzado cada vez que se rompa un vaso o haya trozos de vidrio en el piso de la casa.
- Ten cuidado con los juegos del parque y las barandas de madera. No pases las manos por estas superficies ásperas. Las manos son otro de los lugares en los que es más frecuente tener astillas.
- Presta atención antes de meterte entre arbustos y plantas. Algunas plantas tienen espinas o pinchos, por eso debes tener cuidado antes de zambullirte para alcanzar una pelota. También es buena idea prestar atención antes de sentarte. ¡A nadie le gustaría clavarse una astilla en las posaderas!