La revisión de su hijo: 3 años
¿Qué puede esperar durante esta visita?
Lo más probable es que el pediatra y/o el personal de enfermería que traten a su hijo hagan lo siguiente:
1. Midan el peso y la estatura de su hijo, calculen su índice de masa corporal (IMC) y representen estas medidas en la curva de crecimiento.
2. Tomen la tensión arterial y evalúen la vista de su hijo, si él es capaz de cooperar.
3. Le hagan preguntas, le resuelvan inquietudes y le den consejos sobre los siguientes aspectos relacionados con su hijo:
Comida. El crecimiento se enlentece y se estabiliza durante la etapa preescolar. Ofrezca a su hijo tres comidas principales y dos tentempiés nutritivos al día. Aunque su hijo sea de mal comer, siga ofreciéndole una amplia variedad de alimentos saludables.
Orina y deposiciones. Es posible que su hijo ya sepa utilizar el inodoro y controle bien la orina durante el día. De todos modos, es frecuente que los niños de esta edad tengan accidentes en el control de los esfínteres de vez en cuando y que sigan necesitando los pañales por la noche. Si su hijo todavía no ha dado muestras de estar preparado para aprender a utilizar el inodoro, informe al pediatra. Infórmelo también si su hijo está estreñido, tiene diarrea o parece "retener las heces o la orina" o si ya sabía utilizar el inodoro pero ahora vuelve a tener problemas para controlar los esfínteres.
Sueño. Los niños de esta edad suelen dormir aproximadamente de 10 a 13 horas al día. La mayoría sigue necesitando hacer una siesta.
Desarrollo. Alrededor de los 3 años, es habitual que muchos niños:
- puedan hablar con otra persona y tener al menos 2 intercambios de palabras
- puedan ser entendidos la mayor parte del tiempo cuando hablan
- digan su nombre cuando se les pregunta
- pregunten quién, qué, dónde o por qué
- puedan identificar lo que está sucediendo en una imagen, usando un verbo, como correr o jugar
- observen a otros niños y se acerquen para jugar
- dibujen un círculo cuando se les muestra cómo hacerlo
- ensarten algunos elementos, como cuentas grandes
- se pongan ropa por sí solos
- usen un tenedor
Hable con su médico si su hijo no está cumpliendo uno o varios de los hitos de desarrollo, o si nota que tenía ciertas habilidades pero las ha perdido.
4. Hagan una exploración física a su hijo desvestido mientras usted está presente. Esta incluirá explorar los ojos del niño, examinarle los dientes, auscultarle el corazón y los pulmones y prestar atención al desarrollo del habla y del lenguaje.
5. Actualicen sus vacunas. Las vacunas protegen a los niños de importantes enfermedades propias de la infancia, de modo que es fundamental que su hijo las reciba a tiempo. Los programas de vacunación pueden variar entre distintos consultorios médicos; por lo tanto, pregunte al pediatra al respecto.
6. Soliciten pruebas. Es posible que el médico de su hijo solicite pruebas para controlar la anemia, el plomo y la tuberculosis y pida otras pruebas, si es necesario.
De cara al futuro
He aquí algunas de las cosas que deberá tener en cuenta hasta la próxima revisión, que tendrá lugar cuando su hijo tenga 4 años:
Alimentación
- Durante la etapa preescolar, los niños deberían tomar dos tazas (480 ml) de leche semidescremada o descremada o leche de soja enriquecida con hierro. Ofrézcale otros productos lácteos, como el yogur, que sean semidescremados o descremados.
- Limite el consumo de jugo a no más de 120 ml (4 onzas) al día. Evite los alimentos y bebidas de alto contenido en azúcar y grasa.
- Deje que su hijo decida cuándo tiene hambre o está lleno. Si su hijo opta por no comer, ofrézcale un tentempié un poco más tarde.
- Intenten cenar todos juntos en familia la mayoría de las noches.
Cuidados cotidianos
- Si su hijo deja de hacer la siesta después de comer, asegúrese de que dispone de un tiempo para relajarse y tranquilizarse cada día. En ausencia de siesta, es posible que usted necesite adaptar la hora en que su hijo se acuesta por las noches para asegurarse de que duerme lo suficiente.
- Las pesadillas y los despertares nocturnos son habituales a esta edad. Establezca una rutina fija y consistente para acostar a su hijo. Evite imágenes o relatos que podrían asustar o alterar a su hijo, sobre todo antes de que se vaya a dormir.
- Si ha enrolado a su hijo en un centro preescolar, visiten juntos su aula varias veces antes de que empiecen las clases. Si su hijo no asiste a un centro de preescolar, busque oportunidades para que se relacione y juegue con otros niños.
- Limite el tiempo durante el cual su hijo se expone a pantallas (televisión, computadoras, teléfonos inteligentes, tabletas y computadoras) a no más de una 1 hora al día de programas infantiles de calidad. Vea los programas con su hijo para favorecer el aprendizaje. Haga que el televisor y otras pantallas estén fuera del dormitorio de su hijo.
- Léale a su hijo cada día.
- Establezca unas normas razonables y coherentes y refuerce las conductas positivas de su hijo. Elogie el buen comportamiento y canalice el comportamiento no deseado con calma.
- No le pegue a su hijo. Utilice la "pausa obligada" (penitencia) en vez de las bofetadas.
- Haga que su hijo se cepille los dientes dos veces al día con una cantidad pequeña (no más de un guisante) de pasta que contenga flúor. Programe una visita al dentista para que le exploren y le limpien los dientes. Para ayudar a prevenir las caries, el médico o el dentista de su hijo le puede cepillar los dientes con barniz de flúor de 2 a 4 veces al año.
Seguridad
- Tenga un área de juegos segura y permita abundante tiempo a su hijo para la exploración y el juego, tanto el de tipo simbólico como el de carácter activo.
- Asegúrese de que las instalaciones de los parques o áreas recreativas donde juega su hijo están bien conservadas y son adecuadas para la edad de su hijo. Las superficies deben ser blandas para absorber las caídas (arena, felpudos goma o una capa densa de virutas de madera o caucho triturado).
- Supervise siempre a su hijo cuando esté cerca del agua o de la calle.
- Aplique protector solar, con un FPS -factor de protección solar- de 30 o superior, sobre la piel de su hijo por lo menos 15 minutos antes de salir al exterior para jugar y vuélvaselo a aplicar aproximadamente cada dos horas.
- No permita que su hijo sea fumador pasivo, lo que aumenta el riesgo de enfermedades de pulmón y de corazón. Ser fumador pasivo del vapor de los cigarrillos electrónicos también es nocivo.
- Asegúrese de que su hijo lleva puesto un casco cuando ande en bicicleta o en triciclo.
- Si su hijo ha superado el límite de peso o de estatura establecido por el fabricante de su silla de seguridad para sentarse en el coche orientado en el sentido opuesto al de la marcha, cambie de posición la silla para orientarla hacia adelante. Los niños se deben abrochar la correa de su silla de seguridad orientada en el sentido de la marcha y colocada en los asientos traseros hasta que alcancen el peso o la estatura máxima indicados por el fabricante. Cuando su hijo supere los límites establecidos por el fabricante de la silla, cámbielo a un asiento elevador asegurado con el cinturón de seguridad del coche hasta que mida 4 pies con 9 pulgadas (150 cm) de estatura, generalmente entre los 8 y los 12 años de edad.
- Proteja a su hijo de las heridas por arma de fuego evitando guardar este tipo de armas en su casa. Si tiene un arma de fuego, guárdela descargada y bajo llave. Las municiones se deberían guardar en un lugar distinto. Asegúrese de que los niños no pueden acceder a las llaves.
- Hable con su médico si le preocupa su situación vital. ¿Dispone de todo lo que necesita para cuidar de su bebé? ¿Dispone de suficiente comida, de un lugar seguro donde vivir y de seguro médico? Su médico le puede informar sobre recursos de la comunidad o derivar su caso a un trabajador social.
Estas listas de recomendaciónes son congruentes con las guías de la Academia Americana de Pediatría (AAP) (Directrices Futuros Brillantes o "Bright Futures Guidelines" en inglés).