Una de las preguntas más frecuentes que se hacen los padres es "¿Cuánto debería pesar mi hijo?". Parece una pregunta sencilla, pero no siempre es fácil de responder.
¿Qué es el Índice de masa corporal?
El Índice de masa corporal (o IMC) es una fórmula que usan los médicos para calcular cuánta grasa corporal tiene una persona. La fórmula del IMC utiliza las medidas de peso y estatura para calcular este índice. Aunque se utiliza la misma fórmula para los niños y para los adultos, es un poco más complicado interpretar el IMC cuando se trata de un niño.
En el caso de los niños, el IMC se representa en una gráfica de crecimiento, porque lo que se considera normal cambia con la edad. Se utilizan gráficas de IMC diferentes para los niños y para las niñas, porque el ritmo de crecimiento y la cantidad de grasa corporal es diferente en ambos sexos. Cada gráfica de IMC se divide en percentiles que comparan las medidas de niños de la misma edad y del mismo sexo.
Las categorías que describen el peso de una persona son las siguientes:
Peso por debajo de lo normal: el IMC es inferior al percentil 5 para la edad, el sexo y la estatura.
Peso saludable: el IMC es igual o superior al percentil 5 y es inferior al percentil 85 para la edad, el sexo y la estatura.
Sobrepeso: el IMC coincide con el percentil 85 o lo supera pero sin llegar al percentil 95 para la edad, el sexo y la estatura.
Obeso: el IMC es igual o superior al percentil 95 para la edad, el sexo y la estatura.
Para poder calcular el ICM de su hijo, deberá medir su peso y su estatura con precisión. Las balanzas de baño y los medidores de estatura caseros no siempre dan unos resultados precisos. Por lo tanto, la mejor manera de obtener medidas precisas es pesando y midiendo a los niños en la consulta del médico o en las revisiones médicas que se hacen en las escuelas.
Hablar con el médico sobre el IMC de su hijo
Puede calcular el IMC de su hijo usted mismo, pero considere la posibilidad de pedir a su médico que lo ayude a interpretar el significado de esa cifra. Los médicos no se limitan a utilizar el IMC para evaluar el peso de sus pacientes. También tienen en cuenta la etapa de la pubertad y usan los resultados del IMC de años anteriores para hacer un seguimiento teniendo en cuenta su patrón de crecimiento. Detectar pronto las tendencias, antes de que el aumento o la pérdida de peso se convierta en un problema, puede ser de gran ayuda.
Los niños y adolescentes con sobrepeso pueden desarrollar problemas de salud relacionados con el peso, como la diabetes tipo 2, el colesterol alto o la hipertensión (tensión arterial alta), y tienen más probabilidades de tener sobrepeso cuando sean adultos. Y los adultos con sobrepeso son más proclives a desarrollar problemas de salud, como las enfermedades cardíacas.
Aunque el IMC puede ser un buen indicador de la grasa corporal, no siempre cuenta la historia completa. Una persona robusta o con mucho tejido muscular (como un culturista o un deportista) puede tener un IMC elevado pero no tener demasiada grasa. Del mismo modo, una persona de constitución pequeña puede tener un IMC que está dentro de los márgenes de la normalidad a pesar de tener demasiada grasa corporal. Este es otro buen motivo para hablar con el médico sobre el IMC de su hijo.
Cuando un niño pesa más o menos de lo que debería
Si cree que su hijo ha ganado demasiado peso o está demasiado delgado, hable con su médico. Él lleva tiempo midiendo y pesando a su hijo y sabrá si está creciendo como debería.
Si al médico le preocupa la estatura, el peso o el IMC de su hijo, lo más probable es que le haga preguntas sobre su salud, su nivel de actividad física y sus hábitos de alimentación, así como sobre sus antecedentes médicos familiares. El médico analizará toda esa información para determinar si su hijo tiene o no un problema relacionado con el peso o un problema de crecimiento.
Si su hijo tiene un IMC demasiado alto, su médico le facilitará una dieta, así como recomendaciones sobre el ejercicio físico. Céntrense en las conductas saludables, como comer más fruta y más verdura y estar más activo todos los días. Los médicos también pueden recetar medicamentos o una cirugía para algunos niños.
¿Y si su hijo está demasiado delgado? La mayoría de los niños que pesan menos que otros niños de la misma edad están bien. Es posible que atraviesen la pubertad más tarde que la mayoría de sus compañeros de clase. La mayoría de los adolescentes que pesan menos de lo que deberían se acaban poniendo al día hacia final de la pubertad, poco antes de los veinte años, y muy rara vez necesitan hacer algo para intentar aumentar de peso. Pero hable con el médico si su hijo:
- está perdiendo peso
- está muy cansado o enferma a menudo
- tiene síntomas duraderos, como tos, fiebre o diarrea
- presenta signos de un trastorno de la conducta alimentaria