Qué hacer en caso de deshidratación
La deshidratación ocurre cuando no hay suficiente agua en el cuerpo de una persona. En los niños, esto suele deberse a vómitos, diarrea o ambos. Los niños que están deshidratados deben reponer el agua, junto con las sales y el azúcar. A esto se le llama "rehidratación". Pueden rehidratarse bebiendo pequeñas cantidades de líquido con frecuencia.
¿Cuáles son los signos y los síntomas de la deshidratación?
Algunos de los síntomas de la deshidratación son los siguientes:
- boca seca o pegajosa
- ausencia o escasez de lágrimas al llorar
- ojos hundidos
- en los bebés, fontanela de la parte superior de la cabeza hundida
- orinar menos o mojar menos pañales que de costumbre
- mal humor o irritabilidad
- somnolencia o mareos
¿Cómo se trata la deshidratación?
Si su hijo tiene síntomas de deshidratación, llame a su médico.
Habitualmente, la deshidratación leve se puede tratar en casa. Tal vez, el médico le recomiende darle una solución de rehidratación oral. Esta es la manera de hacerlo.
Lo que necesitará:
- Líquido para que su hijo beba. El mejor líquido para niños deshidratados en una solución de rehidratación oral, como Pedialyte® o Enfalyte® (y muchas tiendas tienen una marca propia). Esta solución contiene la cantidad adecuada de agua, azúcar y sal para ayudar a combatir la deshidratación. Puede comprar soluciones de rehidratación oral sin receta médica en farmacias o supermercados. Si no consigue una solución de rehidratación oral, hable con el médico. Otros líquidos pueden ser útiles para combatir la deshidratación.
- Si amamanta a su bebé, puede continuar haciéndolo. Si su hijo come menos de lo habitual, también debe darle líquidos de rehidratación.
- No les dé agua corriente a los bebés en vez de la solución de rehidratación oral. El agua corriente no contiene los minerales adecuados para un bebé deshidratado.
- Los niños mayores también pueden tomar helados de agua con electrolitos.
- No le dé a su hijo bebidas deportivas, refrescos ni jugo de fruta puro (sin diluir). Estas bebidas contienen demasiado azúcar y pueden empeorar algunos de los síntomas.
- Un pequeño vaso medidor para medicamentos, una jeringa para administrar medicamentos o una cuchara para poder darle líquidos a su hijo.
- Un reloj o un temporizador (como los que tiene en su teléfono).
- Una forma de registrar lo que su hijo bebe. Puede hacerlo en una hoja de papel o con una nota en su teléfono.
1. Vaya de a poco. Dele a su hijo una pequeña cantidad de líquido cada aproximadamente 5 minutos y anote lo que le da.
- Los bebés y niños pequeños pueden comenzar con 10 ml (2 cucharaditas).
- Los niños mayores pueden comenzar con 15 ml (1 cucharada).
2. Programe un temporizador para continuar la rehidratación. Algunos niños tal vez lo disfruten como un juego. Por ejemplo, si su hijo está escuchando música, podría tomar otro sorbo cada vez que escuche el nombre o el estribillo de una canción, o cada vez que comience una nueva canción.
- Una vez que hayan transcurrido dos horas y su hijo haya estado tomando pequeños sorbos sin vomitar, puede dejar de usar el temporizador y darle cantidades más grandes de líquido con menos frecuencia. Y si el niño tiene hambre, puede ofrecerle pequeñas cantidades de alimento.
3. Esté preparado para enfrentar los desafíos más frecuentes, como los siguientes:
- Su hijo se niega a beber. Si su hijo se niega a beber unas pocas dosis, descanse durante unos 15 a 20 minutos y vuelva a intentarlo.
- Su hijo necesita dormir. No hay problema si su hijo duerme una breve siesta. Pero, después de aproximadamente una hora, despiértelo para que beba.
- Su hijo vuelve a vomitar. Si su hijo vomita, haga una pausa de 15 minutos antes de intentar darle nuevamente sorbos de líquido. No le dé medicamentos contra los vómitos o la diarrea, a menos que se lo recomiende su médico.
¿Cuándo debería llamar al médico por una deshidratación?
Llame al médico si su hijo:
- no bebe ningún líquido durante más de unas pocas horas
- tiene menos de un año y solo se alimenta con solución de rehidratación oral (ni leche materna ni leche de fórmula) durante 24 horas
- vomita más que unas pocas veces en 24 horas
- tiene vómitos de color marrón, rojo o verde intenso
- lleva 3 o 4 días sin comer nada
- continúa con signos de deshidratación después de haber intentado rehidratarlo
- no parece estar mejorando
Obtenga atención médica de emergencia si su hijo está muy adormilado o no responde.
¿Cómo puedo ayudar a prevenir la deshidratación?
Cada vez que su hijo esté enfermo, dele más líquidos o una solución de rehidratación oral para prevenir la deshidratación. Dele pequeñas cantidades con frecuencia, sobre todo si está vomitando.
Los niños tienen que beber con frecuencia cuando hace calor. Aquellos niños que participen en deportes o actividades físicas intensas deben beber una cantidad de líquido adicional antes de iniciar la actividad y beber a intervalos regulares (aproximadamente cada 20 minutos) mientras lleven a cabo ese deporte o actividad física.