¿Qué es la neutropenia?
La neutropenia ocurre cuando la sangre no tiene una cantidad suficiente de un tipo de glóbulos blancos. Estos glóbulos, llamados neutrófilos, combaten las bacterias. Las bacterias son gérmenes que causan infecciones. Sin suficientes neutrófilos, puedes tener infecciones graves.
La mayoría de los niños con neutropenia necesitan atención médica inmediata si tienen síntomas de una infección. Las señales comunes incluyen fiebre, enrojecimiento alrededor de un corte y escalofríos o temblores. Con tratamiento rápido, la mayoría de las infecciones en niños con neutropenia mejoran.
¿Cuáles son los signos y los síntomas de la neutropenia?
En comparación con otros niños, los niños con neutropenia tal vez tengan infecciones:
- con más frecuencia
- más graves
- que empeoran rápidamente
Estos síntomas dependen del tipo de infección que tiene el niño (por ejemplo, dolor de oídos en un niño con una infección en el oído).
¿Cuáles son las causas de la neutropenia?
Una persona con neutropenia tiene un bajo recuento de neutrófilos en el torrente sanguíneo.
La neutropenia se puede deber a las siguientes causas:
- infecciones
- medicamentos (como quimioterapia)
- radioterapia
- un problema genético (hereditario)
- el funcionamiento incorrecto de la médula ósea (la parte esponjosa del interior de los huesos que produce células sanguíneas)
- el ataque a los neutrófilos por parte del sistema inmunitario (recibe el nombre de neutropenia autoimmune)
La neutropenia puede:
- estar presente en el momento del nacimiento (neutropenia congénita)
- aparecer y desaparecer (neutropenia cíclica)
A veces, los médicos no conocen las causas de la neutropenia de algunas personas (recibe el nombre de neutropenia idiopática).
¿Cómo se diagnostica la neutropenia?
Los médicos diagnostican la neutropenia con un análisis de sangre que recibe el nombre de hemograma completo (CBC).
Para determinar si un niño tiene neutropenia, un hematólogo (un médico que se especializa en enfermedades de la sangre) hará lo siguiente:
- mirar la sangre del niño en un microscopio
- tomar una pequeña muestra de médula ósea para estudiarla en un microscopio
- pruebas para detectar infecciones
- análisis genéticos
¿Cómo se trata la neutropenia?
El tratamiento de la neutropenia depende de la causa y de su gravedad. No todos los casos requieren tratamiento.
Los médicos recurren al recuento absoluto de neutrófilos para tomar decisiones de tratamiento. El recuento absoluto de neutrófilos es un análisis de sangre en el que se mide la cantidad de neutrófilos. Cuanto más bajo es el número, mayores son las probabilidades de que un niño tenga infecciones graves.
El tratamiento, cuando es necesario, puede incluir lo siguiente:
- corregir la neutropenia a través de:
- inyecciones de factor estimulante de colonias de granulocitos (G-CSF) que estimulan a la médula ósea para que produzca más neutrófilos
- medicamentos con esteroides para impedir que el sistema inmunitario ataque a los neutrófilos
- transfusiones de glóbulos blancos para darle al niño más células que combatan las infecciones
- trasplante de células madre para reemplazar las células madre que forman la sangre por células madre sanas de un donante
- extracción quirúrgica del bazo (esplenectomía), ya que el bazo a veces puede destruir a los neutrófilos
- la prevención y el tratamiento de las infecciones con antibióticos
- Los niños con un recuento muy bajo de neutrófilos, que tienen un riesgo muy elevado de infección deben:
- evitar los lugares públicos, incluidas las escuelas
- evitar el contacto con personas enfermas
- llevar un barbijo si deben salir
- lavarse las manos a fondo y con frecuencia
- cepillarse los dientes y usar hilo dental todos los días
- no usar un termómetro rectal
- limpiarse los cortes inmediatamente después de sufrir una lesión y después cubrirse con una venda
- no usar rasuradoras
- evitar ciertos alimentos, como los siguientes:
- lácteos sin pasteurizar
- frutos secos, frutas y verduras sin cocer
- miel sin procesar
¿Cómo pueden ayudar los padres?
Para ayudar a su hijo, siga las instrucciones del médico relacionadas con:
- los análisis de sangre
- los medicamentos
- la prevención de las infecciones
¿Cuándo debería llamar al médico?
Es importante buscar atención inmediatamente si los niños con neutropenia presentan síntomas de una infección. El tratamiento rápido suele ayudarlos a mejorar.
Llame inmediatamente al médico si ve algún síntoma de infección, como los siguientes:
- fiebre superior a 100,4 °F (38 °C) o más
- escalofríos y/o sudoración
- tos
- falta de aire
- llagas en la boca
- dolor de garganta
- dolor al orinar
- enrojecimiento alrededor de un corte en la piel
- vómitos o diarrea
- dolor en los nervios
¿Qué más debería saber?
Tener un hijo con una afección médica grave puede ser muy duro para cualquier familia. Pero no tiene por qué afrontarlo a solas. Hable con un miembro del equipo de profesionales de la salud que llevan a su hijo sobre formas de encontrar ayuda. También puede visitar sitios de internet para obtener más información y apoyo, como:
- National Neutropenia Network (solo disponible en inglés)