Prepararse para adoptar a un niño
Para muchas familias, la adopción de un niño es una experiencia reconfortante. A continuación, encontrará algunas cosas que debe saber sobre la salud y la atención médica de un niño adoptado, tanto antes como después de la adopción.
¿Cuáles son los diferentes tipos de adopciones?
En una adopción abierta usted conocerá a uno o ambos padres biológicos. Debería poder recibir los detalles de la salud del niño y sus antecedentes familiares.
En una adopción cerrada, no existe ningún tipo de comunicación entre los padres adoptivos y los biológicos. Es por eso que podría ser más difícil obtener información completa sobre la salud del niño. Puede solicitar los registros médicos a través de la agencia o del abogado que está llevando adelante la adopción.
Si adopta a un niño mayor, tal vez tenga una idea de la salud general del niño si pasa tiempo con él antes de la adopción o convirtiéndose primero en sus padres de acogida.
¿Qué debo saber antes de adoptar?
Antes de adoptar a un niño, intente reunir tanta información como sea posible, incluyendo la siguiente:
- la edad, la altura y los antecedentes médicos de los padres biológicos
- los problemas médicos que hay en la familia del niño
- la salud de los hermanos (si es que tiene alguno)
- la información del nacimiento, incluyendo si la madre biológica:
- bebía alcohol, fumaba o usaba drogas durante el embarazo
- usaba medicamentos de venta sin receta o con receta durante el embarazo
- tuvo alguna enfermedad de transmisión sexual durante el embarazo
- recibió cuidados prenatales
- se hizo alguna prueba durante el embarazo
- tuvo algún problema durante el embarazo, el trabajo de parto o el parto
- la gráfica de crecimiento con el peso, la altura y la circunferencia de la cabeza del niño
- los problemas médicos o de comportamiento que ha tenido el niño, incluyendo hospitalizaciones o cirugías
- los resultados de todas las pruebas médicas
- los registros de inmunización
- el desarrollo del niño y, si está en la escuela, cómo le está yendo
- una descripción de la personalidad, los intereses, sus puntos fuertes y las relaciones con otras personas
- dónde vivió el niño (en un hogar de acogida, un hogar grupal o un orfanato)
- cualquier abuso físico, sexual o emocional o falta de cuidado que el niño pueda haber sufrido
Si adopta a un niño que ha estado en un hogar de acogida, es posible que la agencia le diga dónde recibía atención médica el niño para que pueda recurrir a los mismos profesionales o pedirles que envíen los registros del niño al médico de su elección. Esto puede ser útil para evitar pruebas y vacunas innecesarias.
En el caso de las adopciones internacionales, probablemente reciba fotos del niño, pero quizás no cuente con información confiable y completa sobre la salud y la familia del niño. De ser posible, considere viajar para conocer al niño antes de adoptarlo. Puede encontrar más información sobre el proceso de adopción en diferentes países desde el Departamento de Estado de los Estados Unidos.
Visitas médicas antes de la adopción
Para ayudarlo a prepararse para la adopción, es posible que desee reunirse con el médico para revisar los antecedentes médicos y sociales disponibles. El médico puede interpretar los registros médicos del niño y ayudarlo a comprender lo que puede esperar según los problemas médicos, las experiencias y las necesidades especiales del niño. Con esta información, usted puede decidir si el niño y las circunstancias son adecuadas para su familia.
Es posible que desee reunirse con un especialista en medicina de adopciones, en especial si está haciendo una adopción internacional. Estos profesionales médicos se especializan en revisar los registros para la adopción, comprender las necesidades médicas y emocionales de los niños adoptados y conectar a las familias con los recursos disponibles. Cuentan con mucha experiencia en registros médicos internacionales y una comprensión de los riesgos de salud específicos de diferentes países.
Si recurre a una adopción internacional, usted y los integrantes de su familia, así como otros contactos cercanos (como quienes cuidan al niño) deben tener colocadas todas las inmunizaciones de rutina y las de hepatitis A y hepatitis B antes de la llegada del niño. Los padres que viajan a un país extranjero para buscar a su hijo también deben vacunarse para viajar, según las recomendaciones de los CDC (Centros para el Control de las Enfermedades).
Tal vez, las familias también necesiten un comprobante de la vacuna contra el COVID-19 o una prueba con resultado negativo antes de viajar y al regresar a los Estados Unidos.
Adopción de un niño con necesidades especiales
Los niños con necesidades de atención médica especiales tal vez necesiten más apoyo para sus problemas médicos, de desarrollo, de aprendizaje, de comportamiento o psicológicos.
Si está pensando en adoptar a un niño con un problema médico o con necesidades especiales, intente aprender todo lo posible sobre la afección del niño. Hable con un médico sobre la atención especial que tal vez necesite y sobre cómo prepararse antes de tomar la decisión final de adoptarlo. Los padres de otros niños con preocupaciones similares pueden ser un recurso útil tanto antes como después de la adopción.
Atención médica cuando el niño llega al hogar
Después de llegar al hogar, su hijo debería visitar a su médico o a un médico que se especialice en la atención de niños adoptados. El médico puede confirmar y tratar cualquier problema médico, de desarrollo o comportamiento. Tal vez le pida pruebas o le indique que visite a otros especialistas, si es necesario.
Como los registros de inmunización tal vez no estén completos o sean imprecisos, algunos niños adoptados quizás necesiten recibir algunas vacunas que no recibieron o volver a recibir otras. El médico puede comprobar si el niño tiene anticuerpos que lo protegen por haber recibido inmunizaciones o haber tenido infecciones en el pasado.
¿Qué problemas de salud podría tener el niño?
Según la información médica que tenga a su disposición, la exploración física y el lugar de donde viene el niño, es posible que el médico desee descartar los siguientes problemas:
- anemia
- niveles elevados de plomo
- retrasos en el desarrollo
- hepatitis B y hepatitis C
- virus de la inmunodeficiencia humana (VIH)
- parásitos intestinales
- problemas de oído o de vista
- trastornos metabólicos
- problemas de salud mental o de comportamiento
- síndrome de alcoholismo fetal o efectos del alcohol sobre el feto
- raquitismo
- sífilis
- problemas en la glándula tiroidea
- caries dental
- tuberculosis
Con frecuencia, los niños adoptados se resfrían, tienen infecciones leves, malestar estomacal y diarrea poco después de llegar a su nuevo hogar. Estos síntomas suelen aliviarse a medida que el niño se adapta a su nuevo entorno. Si está preocupado por la salud del niño, llame al médico.
Facilitar la transición
Si ha decidido adoptar a un niño, obtenga tanta información como sea posible sobre su rutina diaria, sus habilidades, lo que le agrada y lo que no le gusta. Mantener una rutina sistemática y servirle alimentos que le son familiares pueden ser una forma de hacer que la transición sea más sencilla. Ayude a su hijo a sentirse seguro y amado en su nuevo hogar.
Los niños adoptados tal vez tengan problemas para adaptarse a su nuevo hogar, en especial los que son mayores, han vivido en varios hogares o no hablan su mismo idioma. Las rabietas, el llanto, el mal comportamiento, el retraimiento, los problemas para dormir y los problemas de alimentación (como acumular comida o comer en exceso) son comunes. Algunos niños que están esperando ser adoptados pueden haber atravesado un trauma y necesitarán más apoyo y consuelo. Hable con el equipo médico que atiende a su hijo sobre las estrategias para brindarle apoyo a su hijo y ayudarlo a atravesar esta transición.