Tricotilomanía (tirarse del pelo)
También llamada: Trastorno de arrancarse el cabello, tic
La tricotilomanía es un hábito que consiste en arrancarse el propio pelo incluyendo, a veces, el pelo de la cabeza, cejas, pestañas, axilas, pubis y cualquier parte del cuerpo. Las personas pueden arrancarse unos pocos pelos a la vez o un mechón entero. Algunas personas pueden mirar, jugar, masticar o comerse el pelo después de arrancarlo.
Es posible que la gente no entienda por qué las personas que se arrancan el pelo tienen dificultades para dejar este hábito. Pero la realidad es que a las personas que tienen este hábito les resulta muy difícil dejarlo. Aunque hayan intentado dejar de hacerlo, arrancarse el pelo puede parecer imposible de controlar.
Si tú estás lidiando con este hábito, no está solo. Y existe un tratamiento que puede ayudarte a superarlo. Necesitas tiempo, paciencia y práctica. Pero cuando se aprenden las habilidades adecuadas, las personas pueden controlar el hábito.
¿Qué es la tricotilomanía (tirarse del pelo)?
Arrancarse el pelo es un tipo de comportamiento repetitivo centrado en el cuerpo. Son comportamientos de cuidado personal que se convierten en hábitos fuertes y no deseados.
Existen diferentes tipos de comportamiento repetitivo centrado en el cuerpo. Por ejemplo, algunas personas se muerden o mastican las uñas, los labios o el interior de las mejillas. Algunos se arrancan o muerden la piel o las uñas. Otros se arrancan, rompen, retuercen o muerden el cabello. Todos estos hábitos se convierten en comportamientos repetitivos centrados en el cuerpo si una persona los lleva a un extremo.
No son un tipo de autolesión. Pero pueden causar daños al cabello, la piel o las uñas.
¿Puede la tricotilomanía causar problemas de salud?
Arrancarse el cabello puede dejar zonas calvas o áreas sin pelo, cejas o pestañas. Puede causar dolor o infección en la piel. Puede dejar cicatrices. Si las personas mastican o tragan cabello, se puede formar una "bola" de cabello en el estómago. Esto puede provocar dolor abdominal u otros problemas de salud.
¿Cuál es la causa de la tricotilomanía (tirarse del pelo)?
No está claro por qué algunas personas se tiran del pelo y otras no. Los expertos creen que los genes (factores genéticos), las hormonas y el aprendizaje de hábitos juegan un papel importante.
Genes. Las personas que se arrancan el pelo pueden tener genes que hacen este hábito más probable.
Hormonas. Las hormonas de la pubertad y las hormonas del estrés pueden hacer que, las personas que sean genéticamente propensas, se arranquen el pelo.
Aprendizaje de hábitos. Muchas personas con tricotilomanía sienten comezón, hormigueo o la necesidad de tirarse del pelo. Cuando se tiran del pelo, sienten una breve sensación de alivio. Para el cerebro, este alivio es una recompensa. El cerebro libera hormonas de recompensa, como la dopamina. Esto crea una vinculación entre el tirón del pelo y la recompensa. Así se genera el hábito de arrancarse el pelo.
Cada vez que la persona se arranca el pelo, el cerebro libera una pequeña cantidad de la hormona de recompensa. La persona se siente "recompensada" con una breve sensación de alivio. Esto hace que el impulso sea más difícil de resistir. Continuar con el hábito lo hace más fuerte.
¿Qué sienten las personas que tienen tricotilomanía?
La mayoría de las personas que se arrancan el pelo se sienten atrapadas en un hábito que no desean continuar. Es posible que se sientan frustradas por no poder controlarlo. Es posible que se sientan molestas por los comentarios de las personas que no entienden lo que significa esta afección. Algunos son duros consigo mismos por no poder dejar el hábito. Pero arrancarse el pelo no es culpa de la persona que lo hace.
La persona que se arranca el pelo podría sentirse molesta porque esto afecta su apariencia. Algunos pueden intentar cubrir las zonas sin pelo con sombreros o maquillaje. Arrancarse el pelo también puede afectar la forma en que se relacionan con los demás. Algunos intentan ocultar el problema, incluso ante familiares o amigos. Es posible que eviten hacer cosas que puedan permitir que otros se den cuenta de su hábito.
¿Qué puede ayudar a las personas con tricotilomanía (tirarse del pelo)?
La terapia puede ayudar a las personas a superar la tricotilomanía. El tipo de terapia más utilizado se llama terapia para revertir hábitos. Es un tipo de terapia cognitivo conductual. En esta terapia, las personas se reúnen con un terapeuta para aprender habilidades que los ayuden a revertir el hábito de arrancarse el pelo.
La reversión de hábitos se basa en la forma en que el cerebro aprende hábitos. Los mismos principios pueden ayudar a las personas a desaprender (olvidar lo aprendido) el hábito que desean eliminar.
Para desaprender el hábito de arrancarse el pelo, las personas deben resistir la tentación de arrancarse el cabello, pelo o vello. Cuando resisten el impulso, la hormona de la recompensa no se libera. Esto rompe el ciclo de arrancarse el pelo. Sin la recompensa, el hábito puede empezar a desaparecer por sí solo.
Esto suena sencillo. Pero al principio no es fácil. La necesidad de tirar del pelo puede resultar fuerte. Puede ser muy difícil resistirse. La terapia ayuda a las personas a desarrollar habilidades que lo hacen posible. Con la orientación adecuada (y mucha práctica) se vuelve más fácil. Para que esto funcione, las personas deben resistir la tentación de arrancarse el pelo cada vez que sienten la necesidad de hacerlo.
Además de la terapia para revertir el hábito, existen otras formas de terapia que son efectivas para dejar de arrancarse el pelo. Entre estas se incluyen la terapia conductual integral (ComB), la terapia conductual dialéctica (DBT) y terapia de aceptación y compromiso (ACT). Cada una de estas formas de terapia ofrece herramientas que las personas pueden utilizar para tratar la tricotilomanía.
Se necesita tiempo, paciencia y práctica. Pero con la orientación y el apoyo adecuados, las personas pueden eliminar este hábito.
¿Qué debo hacer si tengo tricotilomanía?
Habla con un adulto. Si te estás tirando del pelo, habla de ello con uno de tus padres, un médico, un consejero de salud mental o un adulto en quien confíes. Puede ser difícil hablar de ello. Pero es mejor ser abierto y honesto para poder obtener la ayuda necesaria.
Acude a tu médico. Los médicos te harán preguntas, te escucharán y hablarán contigo y con tus padres. Revisarán otras cosas que podrían causar tirones o la caída del cabello. Si diagnostican tricotilomanía, podrían derivarte a un terapeuta que te ayudará a controlar el hábito.
Acude a las visitas con el terapeuta. La terapia puede requerir muchas visitas. Se necesita tiempo y práctica para dominar las habilidades que te ayudarán a romper el hábito. Pero notarás avances a lo largo del camino.
Deja que otros te ayuden. El apoyo de tus seres queridos es de gran ayuda cuando pasas por momentos como el de arrancarte el pelo. Puede ser algo positivo hablar sobre esto con una persona en la que confíes. También te sentirás apoyado cuando estas personas hagan pequeñas cosas por ti o pasen tiempo contigo, demostrándote que se preocupan por ti.
Haz cosas para controlar tu estrés. El estrés no provoca la tricotilomanía. Pero el estrés puede empeorarla en las personas que la padecen. Asegúrate de comer alimentos saludables. Haz ejercicio físico y mantente activo. Tómate un tiempo para descansar, relajarte o meditar. Dedica tiempo a las cosas de las que disfrutas. Sé amable y ayuda a los demás. Hacer estas cosas sencillas todos los días ayuda a mantener los niveles de estrés bajo control.
La fundación TLC Foundation for Body-Focused Repetitive Behaviors es un buen recurso para obtener información, ayuda y apoyo.